Antes de dormir hay muchas atenciones que puedes darle a tu cuerpo y tu piel sin complicarte demasiado.
1) Desmaquillar tu rostro todas las noches, no importa cuán cansada estés o la hora que llegues a casa, este paso no debes saltártelo. Recuerda que tu rostro también necesita descansar.
2) Lavar tu cara con un jabón suave o, si sufres de acné, usar alguno en gel con cualidades matificantes para controlar la segregación de grasa.
3) Aplicar una crema hidratante especial para la noche que sea regenerativa, así mientras duermes tu piel recibe una atención especial.
4) Recién salida de la ducha, aplicar aceite corporal desde tus pies hasta tu cuello, colócarte la pijama y a dormir. Al día siguiente tendrás una piel suave y sedosa.

